Para todos los entusiastas de la aviación, el emblemático aeropuerto Juancho E. Yrausquin se encuentra en la pequeña isla caribeña de Saba, perteneciente a los Países Bajos.
El aeropuerto cuenta con la pista de aterrizaje regular más corta del mundo , de sólo 400 metros de longitud, que termina a ambos lados en una pronunciada caída hacia el mar. Sólo pueden volar aquí pequeños aviones de hélice de hasta 19 plazas.
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Todos los vuelos regulares son operados por Winair y conducen al aeropuerto de SXM, donde aterrizan tras un vuelo de 12 minutos.
La terminal del aeropuerto se parece más a una casa familiar. Dentro hay un mostrador de facturación y un control de pasaportes, por el que siempre se pasa, incluso de camino a San Martín, que también pertenece a los Países Bajos.
No hay control de seguridad antes de la salida.
La única puerta de embarque está situada en una terraza exterior con vistas a la pista.
Tasa de salida
Al salir del aeropuerto de Saba, hay que pagar una tasa de salida en el mostrador de facturación. La tasa de salida nunca está incluida en el precio del billete de avión.
La tasa es de 10 usd.
Se puede pagar en efectivo (dólares estadounidenses) o con tarjeta.
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